CARLOS BAZZANO: SOBRE LA SED, EL FUEGO Y LA LITERATURA

ENTREVISTA AL ESCRITOR, POETA Y CUENTISTA PARAGUAYO 
Por Milson De Jesús Godoy Caballero

Escritor, poeta y cuentista paraguayo nacido en Buenos Aires en el año 1975, de padres paraguayos que migraron al extranjero buscando mejores condiciones de vida. Carlos Bazzano, en un bar de Asunción, relata sus primeros años en el devenir del mundo literario que hoy lo envuelve, que lo hace vivir al límite.

Desde niño, Carlos Bazzano, ya se destacaba en sus poemas y fue fortaleciendo sus conocimientos hasta convertirse en un  ícono de la escritura paraguaya.
No creció con su padre, quien solo lo visitaba de manera ocasional. Su madre, como cuenta Carlos, “era madre y padre al mismo tiempo”. Volvieron a Paraguay cuando él tenía tres años, puesto que su madre no quería desarraigarlo. Al llegar, se toparon con el auge de la dictadura stronista, y con bastante pobreza económica, pero con gran riqueza humana decidieron luchar contra las adversidades de la época.
Tras volver a su tierra madre se instalaron en Luque, y allí pudieron cumplir el sueño de comprarse un pequeño terreno a cuotas. Hicieron frente a la economía gracias al trabajo de su madre, el cual consistía en transportar telas, sobre su cabeza, caminando, de San Lorenzo a Luque.

Carlos dirige el Laboratorio de Creación Literaria,
donde enseña técnicas de escritura.

“Siempre fui una persona muy tímida, 
con muchas dificultades de hablar”
Dio sus primeros pasos al conocimiento en un colegio humilde y nacional de Luque.Fue allí donde tuvo su primera aproximación a la poesía: “Si bien esa escuela no tenía biblioteca, hubo grados que debían compartir el espacio. Recuerdo que alguna vez la profesora pidió que se escribiera un poema sobre la primavera, y mi poema fue el que gustó más”.
Para Carlos, la experiencia de haber recibido, a los nueve años, elogios por su poema “Primavera” tuvo resultados positivos y negativos.Ocurrió que, tras ser elegido, tuvo que pasar a declamar su poema ante un público de aproximadamente 200 niños y, por eso, terminó siendo blanco de burlas y agresiones.
Sus siguientes años transcurrieron indecisos entre buenas y malas experiencias. Bazzano relata que: “Era tiempo de dictadura. Me acuerdo que una vez me hicieron un interrogatorio porque mi madre no estaba afiliada al Partido Colorado. Y además era madre soltera, cosa que en una sociedad conservadora era inaceptable; entonces mis profesores me preguntaban sobre qué pensaba políticamente mi madre, quiénes se iban a mi casa… nada  de esto era con fines pedagógicos, sino quen esa época un profesor, para ser profesor, debía mostrar  su afiliación al partido colorado y tener la bendición de la seccional de la zona”.

PUBLICACIONES
·         En el año 2008 gana el primer premio del Concurso Nacional de Cuentos El Cabildo.

·         En el año 2014 publica su primer poemario “Hasta ahí nomás, Descartes” conjunto al escritor Eulo García.

·         En 2015 recibe el primer premio del Concurso Nacional de Cuentos Jorge Ritter. En ese mismo año, publica su segundo libro “Q.E.B.D. (Que en bar descanse)” y también el tercero “Escombros”.

·         En el año 2016 participa en Daqui e dali. “Antología de poemas latino-americanos”. Editorial Ecos Latinos- São Paulo, Brasil. En el mismo año Guatapu, “Voces poéticas de Latinoamérica”, Edición Independiente. Asunción, Paraguay. También publica su cuarto libro, “Ñasaindy”, poemario presentado en agosto de ese año.

·         En el año 2017 sus poemas en prosa se incluyen en la Antología Del Caos a la Intensidad, Vigencia del poema en prosa en Sudamérica, compilación que trata sobre la vigencia del poema en prosa en América del Sur la cual fue realizada por el escritor argentino Claudio Archubi y editada por la editorial peruana Hijos de la lluvia. También sus poemas y cuentos fueron incluidos en la antología Voces de América Latina recientemente editada en Nueva York, editada por la escritora dominicana. En el mismo año, lanza su quinto libro “Nocaut”.
 “Una vez me hicieron un interrogatorio porque mi madre no estaba afiliada al Partido Colorado”

Más tarde, de joven, fue al Colegio Nacional de Luque, en esa etapa comenzó a reflexionar de manera más profunda. “Siempre fui una persona muy tímida, con muchas dificultades de hablar, y las personas con las que terminaba teniendo contacto eran personas que tenían las mismas necesidades intelectuales”.

Bazzano se adentró en la literatura hace más de dos décadas, pero cuenta que su primera publicación lo hizo en su adultez: “Mi primer libro editado lo hago en el 2014, ya a los 38 años.  Muchísimos años aporté con un poema un cuento en diferentes antologías que se fueron gestando de manera alternativa, pero tenía mucho pavor. Terminé un poemario, casi terminé una novela, escribí un montón de cuentos, pero no podía cerrar la propuesta del libro, hasta el 2014”.
Habla también de su estructura y su método literario: “A mí me enseñaron una disciplina adaptada para obreros, y tengo clara dos cosas. Uno, tengo que buscar formas para poder alimentarme, y ayudar a la gente con la que me vinculo. Dos, hay que trabajar en cosas que te permitan sobrevivir en este mundo hostil. También tengo claro que, si no estoy leyendo, si no estoy escribiendo, entonces no estoy viviendo. Es así que sé que el trabajo me hace sobrevivir, y la literatura me hace vivir”.
Carlos Bazzano dedica unas últimas palabras a los jóvenes entusiastas que tienen intenciones de adentrarse en el incierto mar literario, “creo que mis consejos están en las concepciones de mi vida personal que pude contar. La idea es trabajar con tu sed, si amás leer, leé. Quien guste del fuego, que soporte las quemaduras. Eso decía García Lorca. Si te gusta jugar con fuego, tenés que saber que la quemadura forma parte del oficio. Si vamos a saltar de la omnipotencia absoluta a la impotencia absoluta, hay que recordar siempre la potencia de nuestro trabajo que es la escritura. Leer, escribir, vivir con la intensidad que uno quiere, y leer mucho a los grandes autores que nos gustan.
También es bueno pelearse con la escritura, con tu escritura, hasta lograr lo esperado. El resultado puede no ser bueno, pero es tu resultado, tu trabajo.
Cuando tenés mucha sed: hay pocas excusas. Si te gusta un autor y no tenés el libro te vas a una biblioteca e igual lo leés. Si no podés ir a la biblioteca porque trabajás, entonces preguntás, bajás de internet.
Las cosas no son fáciles, pero tampoco imposibles.
 Lo ideal es trabajar con eso, y si tenés verdadera sed, si tu sed es verdadera, buscá la forma de saciar esa sed, ya sea con libros o fotocopias. No parar si es de verdad lo que amás, y si es de verdad lo que amás, como decía Sabato, terminás no escribiendo cualquier cosa, escribís lo que de verdad sentís. Es eso, sin contemplaciones”.





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